Progreseños alzan la voz en la Ciudad de México: Exigen justicia tras fallo de la Sala Xalapa.
PROGRESO. – La incertidumbre y la indignación han tomado las calles del puerto de Progreso, tras la controvertida sentencia de la Sala Regional de Xalapa de otorgar el triunfo electoral al PAN, a pesar de que el pueblo eligió al doctor. Raúl Alvarado como su presidente municipal electo.
Este revés judicial ha generado una oleada de descontento que movilizó a un nutrido grupo de progreseños a la Ciudad de México, donde alzaronn la voz en defensa de su derecho a decidir.
En una manifestación pacífica frente al Palacio Nacional, a la entrada de la conferencia matutina del Presidente Andrés Manuel López Obrador, los ciudadanos de Progreso expresaron su repudio a lo que consideran un atropello a la democracia y, a la voluntad popular.
Con pancartas en mano y la convicción de que su lucha es justa, los progreseños denunciaron las maniobras legales que, según ellos, han distorsionado el resultado electoral y violado los derechos constitucionales del pueblo de Progreso que eligió al doctor Raúl Alvarado como su alcalde.
En transmisión en vivo a través de las redes sociales, uno de los manifestantes expresó: “Nos encontramos aquí en la Ciudad de México para protestar contra la violencia de la democracia hacia el puerto de Progreso. No vamos a permitir que leyes corruptas nos arrebaten lo que el pueblo decidió. Exigimos justicia, no solo por Progreso, sino por la democracia en todo México”.
Las declaraciones no se detuvieron allí. Los progreseños que participaron en la protesta dejaron claro que seguirán luchando hasta las últimas consecuencias para defender el voto que consideran legítimo. “No nos vamos a conformar con que nos roben la presidencia municipal. Vamos a pelear hasta que se respete la voluntad del pueblo, porque Progreso merece un gobierno que realmente lo represente, y ese gobierno es el del Dr. Alvarado”, afirmó otro de los asistentes.
La movilización ciudadana es reflejo del sentimiento generalizado en Progreso, donde la comunidad sigue en vilo, esperando la resolución del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación. La expectativa es alta, y la esperanza de que se rectifique lo que consideran una injusticia mantiene viva la llama de la lucha.
En el puerto, la tensión es palpable. Las familias progreseñas, que han sido testigos de lo que consideran una violación a su derecho fundamental, observan con atención el desarrollo de los acontecimientos, mientras expresan su solidaridad con aquellos que han viajado hasta la capital para hacer oír su voz. “No estamos solos. El pueblo de Progreso está unido y fuerte, y no descansaremos hasta que se haga justicia”, concluyó uno de los líderes del movimiento en la Ciudad de México.
La marcha de los progreseños en la Ciudad de México no solo ha captado la atención local, sino que ha empezado a resonar en otras partes del país. Este es un claro mensaje a las autoridades electorales y al gobierno de que el pueblo no tolerará decisiones que atenten contra su derecho a elegir a sus gobernantes. Progreso, un puerto pequeño pero con una comunidad unida y decidida, ha demostrado que la voz del pueblo no puede ser silenciada, y que la lucha por la democracia es una causa que merece ser defendida hasta el final.