Especialistas médicos, autoridades, asociaciones civiles, académicos y padres de familia respondieron al llamado de la diputada Zhazil Méndez Hernández, quien realizó este jueves un Foro sobre Salud Auditiva en el auditorio de la Torre Sisprovisa.
Luego de una serie de reuniones personales, la legisladora convocó a este espacio de diálogo y colaboración con el objetivo de atender la experiencia y el conocimiento de quienes han trabajado y viven de cerca con la discapacidad auditiva.
La hipoacusia o sordera sume a los que la padecen en una profunda desventaja. Es la más discapacitante de las discapacidades porque es invisible y desafortunadamente se detecta tardíamente en muchos casos, consideró.
En específico queremos conocer el impacto que tiene el Tamiz Auditivo Neonatal como medida de prevención de una discapacidad que impide el pleno desarrollo de las niñas y los niños, indicó.
La diputada local explicó que el tamiz auditivo es una prueba que no causa dolor ni molestia y sirve para detectar cualquier tipo de sordera en los recién nacidos. La prueba dura unos segundos y el personal de salud lo realiza con un pequeño aparato digital.
Queremos construir juntos una propuesta que garantice el acceso integral a la salud auditiva de las niñas, niños y adolescentes del estado de Yucatán, desde la detección temprana con el tamizaje, hasta la rehabilitación y acompañamiento, añadió.
Los convocados a la Torre Sisprovisa trabajaron agrupados en diferentes mesas de diálogo, con un moderador que eligieron ellos mismos y al final presentaron propuestas, conclusiones y reflexiones, que ya son analizadas por el equipo técnico y jurídico de la diputada Méndez Hernández.
En el Foro estuvieron presentes especialistas y funcionarios del Colegio de Neonatólogos, el Colegio de Pediatras, el Colegio de Medicina General, el Colegio de Trabajo Social del Sureste, el Hospital O’horan, la Secretaría de Salud del Estado, la Universidad Autónoma de Yucatán, la Universidad Mesoamérica de San Agustín, la Comisión de Derechos Humanos, el Registro Civil y los Ayuntamientos de Mérida, Yaxcabá, Hunucmá y Kanasín.
También asistieron activistas de la Asociación del Deporte para Personas con Discapacidad Auditiva, la asociación Aprendamos Juntos, la Asociación Juntos Somos el Cambio, la Coordinadora de Primera Infancia, la Fundación Maqueta, el Club Rotarios, el Club Rotarios-Meridanas, además de padres de familia y personas con discapacidad, como la maestra Rocío Alonso Méndez, autora del libro “Vamos, hay esperanza. Soy sordo”, sobre su hijo Alberto.

